Respondiendo la solicitud de Samuel Saravia, publicamos su poema de forma íntegra, sigue adelante Samuel.
¡A Precio de un beso!
QUE LE PUSIERA PRECIO A MI SONRISA,
FUE LO QUE TU ME PEDISTE;
A LAS PALABRAS SUAVES CUAL BRISA,
A MI SENTIMIENTO MÁS TRISTE,
A MIS PALABRAS TORPES Y MUDAS,
QUE TÚ RARAMENTE COMPRENDISTE
Y QUE EN TUS MIRADAS LIBRES DE DUDAS,
GRATA SENSACIÓN DE AMOR ME DISTE.
A
AQUELLA PASION ESCONDIDA,
A AQUEL LLANTO DORMIDO,
A TODAS LAS COSAS LINDAS DE MI VIDA,
AL JADEO SUTIL, AL SUAVE GEMIDO,
A LAS LAGRIMAS QUE SE HAN ESCURRIDO,
A AQUELLA MIRADA TRISTE PERDIDA,
QUE DE MIS SOLLOZANTES OJOS HA SALIDO.
AL AMOR CLANDESTINO Y PROHIBIDO,
QUE EN MI CORAZON ESTA HOSPEDADO,
A LA
FLECHA QUE LANZO CUPIDO,
A MI PECHO TRASPASADO,
AL PALPITAR DE MI CORAZON PARTIDO,
AL SENTIMIENTO ENSANGRENTADO;
QUE DE TU BELLEZA SIENDO CAUTIVO
Y EN MI SOLEDAD SOY TU ESCLAVO.
¡PRECIO A TODO AQUELLO…!
A UN DETALLE PEQUEÑO,
A OLFATEAR TU CUELLO,
A OLVIDAR QUE TÚ TIENES DUEÑO,
A GURDAR DE TUS OJOS SU DESTELLO,
A SER ESCLAVO DE TUS OJOS BELLOS.
CUANTO VALE EL NO VERTE,
EL NO TENERTE CERCA,
EL VIVIR INMERSO, CAUTIVO Y PRESO
Y COMO TU LO DIRIAS, RARAMENTE,
PERO MI FIN SE ACERCA,
PORQUE TE VENDI MI EXISTENCIA,
¡¡¡¡A PRECIO DE UN BESO!!!!
HOY LO GUARDO ARRAIGADO EN MI,
EN UN COFRE DE ORO FINO,
FORJADO POR EL RARO DESTINO,
LO CUAL ME MOSTRÓ EL CAMINO
QUE ME ATRAJO HACIA TI.
¡TE EXTRAÑO! MI AMANTE DULCINEA.
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Samuel Saravia
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